Carlos Ignacio Alonso Palacios y P. Aarón Reyes Natividad / Catemaco, Ver.—Una característica singular de nuestra Diócesis de San Andrés Tuxtla es la celebración anual del DÍA DEL CATÓLICO, fecha sumamente significativa para esta porción del Pueblo de Dios que camina en estas sureñas tierras veracruzanas de Los Tuxtlas y Sotavento, pues en ella ha visto florecer su caminar pastoral y se ha revitalizado año con año al encuentro del Buen Pastor, resucitado y glorioso.
Este año, el DÍA DEL CATÓLICO nos sorprendió con un nuevo rostro, después de 46 años de celebrarse y conservando muchos de su signos de antaño como el reunirnos en Catemaco en torno a nuestro Obispo y a Nuestra Señora del Carmen, patrona de nuestra grey, en el presente se ha convertido en una fiesta misionera y portadora de la misericordia, tal como lo soñaron nuestros pastores especialmente Mons. Ranzahuer, quien iniciara esta hermosa fiesta, y que hoy continua Mons. Fidencio López Plaza quien no aparta su mirada de la labor de sus predecesores pero tampoco del querer del papa Francisco de una Iglesia en salida y portadora del perdón.
Fue alrededor de las 9:30 de la mañana que los fieles, sacerdotes, diáconos y seminaristas se reunieron con nuestro Obispo en el Santuario de la Virgen del Carmen para iniciar la tradicional procesión al terreno San Juan Pablo II, donde ya otros fieles aguardaban el momento de que iniciará la Santa Misa programada para el mediodía.
Ya juntos, en el lugar de la celebración, todos se unieron al rezo de la coronilla de la Divina Misericordia que precedió a la Santa Eucaristía, mientras que los sacerdotes presentes administraban el sacramento de la reconciliación a los fieles que lo solicitaran.
Sin embargo, los signos que más resaltaron en este DÍA DEL CATÓLICO fueron sin duda: el envío de las 1200 hermanas del Grupo Apostólico Mariano (mejor conocidas como Marianas) y de los 500 jóvenes que también respondiendo al llamado de su pastor desde las distintas latitudes del territorio diocesano y que ya vivieron el anuncio Kerigmático coordinado por el padre Rigoberto Razo. Señales fuertes y novedosas a la vez distintas pero tan motivadoras como las ordenaciones sacerdotales que durante años representaron el momento más emotivo de esta celebración.
Un día lleno de sorpresas que finalmente constataron los nuevos aires que renuevan nuestra diócesis, pues este día no sólo fue cercano al primer aniversario episcopal de Mons. López Plaza sino que también fue el primer DÍA DEL CATÓLICO que presidió y al cual le imprimió su sello tan particular.
Además nuestro Obispo celebró su primer aniversario episcopal donde afirmó a este medio: “mi primer año que festejo con ustedes y quiero recordar las palabras que en alguna ocasión se convirtió en lema de nuestra diócesis: nada sin lo presbíteros y nada sin los laicos”, pastores y fieles, unidos formando un solo rebaño del Señor.
EL OBJETIVO:
Celebrar el DÍA DEL CATÓLICO, como una gran oportunidad tomando conciencia del significado de esta nota de la Iglesia, para hacer de cada año, un acontecimiento cumbre y fuente del proceso evangelizadores en nuestra Diócesis.
SIGNIFICADO DE “CATÓLICO”.
La palabra católico viene del latín catholícus, y éste del griego καθολικός (katholikós), es decir ´universal´. Ya los clásicos griegos como Aristóteles y Polibio la usaban como objetivo con el sentido de algo Universal, para todos. Fue libremente usada por los primeros escritores cristianos en lo que podemos llamar sentido primitivo y no eclesiástico. Así encontramos frases como “la resurrección católica” (Justino Mártir), “la bondad católica de Dios” (Tertuliano), “los cuatro vientos católicos (Irineo), en donde hoy deberíamos decir la “resurrección general”, “la bondad absoluta o universal de Dios”, los cuatro vientos principales”.
“La combinación ´la iglesia católica´(i katholiki ekklisia) se encuentra por vez primera en la carta de San Ignacio a los Esmirnos, escrita alrededor del año 110. Dice así: “Allí donde deba aparecer el Obispo, donde la gente, incluso donde Jesús podía estar, hay una iglesia universal (Katholike)”.
Nuestra celebración se ubica además en el contexto de la Pascua, y más concretamente el día del “Buen Pastor” (Jn. 10, 1-10). Todo un tema para actualizar el sentido de la iglesia “Católica”.