- Las elecciones se decidirán en tribunales
Dado los resultados de la intensión del voto que se han hecho públicos hasta el momento, en el que cada candidato asegura ir ganando la elección a gobernador de Veracruz, lo más seguro es que luego de que el electorado acuda a votar el próximo domingo 5 de junio, persistan en su inercia de que ellos son los ganadores y en consecuencia recurran al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) como última instancia.
Se dice, entonces que, algunos partidos buscarán ganar en el Tribunal Electoral lo que no pueden ganar en las urnas.
De acuerdo a como se han venido desarrollando las campañas electorales, que más que convencer de la vialidad de sus propuestas, han enfocado sus recursos y baterías a atacar a sus oponentes, en un ambiente de confrontación, descalificación y agresiones mutuas, lo único que van a conseguir es que la gente —chocada ya de tantos conflictos—, termine por alejarse definitivamente de la política de partidos.
Ante el panorama que se ha presentado hasta el momento, es casi seguro que el cien por ciento de las elecciones de gobernador y diputados —no solo en el estado de Veracruz— sino en todas las entidades, se vayan a resolver en el TEPJF.
Así las cosas.
La madre de todas las batallas, se continuará librando más allá de la fecha del domingo 5 de junio, todavía se tendrán que pasar por el filtro del Instituto Nacional Electoral (INE), pero las cosas seguramente no terminarán ahí, sino que se prolongarán hasta el TEPJF.
Los argumentos y denuncias son muchas y seguramente en los próximos días en que todo mundo tendrá que meter el acelerador a fondo para tratar de despuntar a sus oponentes, seguirán aumentando las denuncias por violaciones a las normas electorales establecidas.
Hasta ahora el árbitro electoral ha permitido esta reacción y “no hace nada” por evitarlo.
Frente al árbitro se pican los ojos, se dan abajo del cinturón y el árbitro no dice nada, queja tías queja, muy rara vez impone alguna medida.
Estas circunstancias, sin lugar a dudas están afectando las elecciones y las hacen más intensas, en algunos estados hasta violentas, tanto física como verbalmente.
Lo cierto es que a nadie le gusta lo que está pasando, estamos llegando a niveles de descalificación que rayan en el ataque, en la agresión y a nadie le conviene eso. Entonces, en estos momentos ya hay que adoptar una actitud prudente y mesurada, sobre todo, vamos a ayudar a la gente a que salga a votar, que es lo principal.
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