- Se incrementan 50% llamadas de emergencia falsas
- Se pierde tiempo atendiendo llamadas de broma
En lo que va del año se han incrementado las llamadas de emergencia un 50%, en comparación del año pasado, lo que atenta considerablemente contra los servicios de auxilio por parte de las corporaciones que se dedican al rescate y ayuda de lesionados y a sofocar incendios, que es lo más lamentable.
Para Protección Civil Municipal, el problema se agrava cuando sin saber se tiene que acudir a una llamada falsa y esto retrasa la ayuda a un verdadero siniestro, como sucedió tan solo el fin de semana pasado en que se alertó sobre la volcadura o accidente de un camión de transporte público, cuando en realidad solo se encontraba a orillas de la carretera varado por un problema mecánico.
La tecnología y la facilidad con que se tiene actualmente un dispositivo móvil que puede comunicar desde cualquier parte a personas de diversas edades (desde niños hasta ancianos), ha provocado que se tenga un incremento en esas llamadas falsas que se convierten en un verdadero peligro para los que en verdad lo requieren.
Pese a que se cuenta con identificador de llamadas, no ha sido posible conocer el lugar de procedencia y sobre todo aplicar alguna sanción a personas bromistas, que en su mayoría son menores de edad, que hablan al amparo de sus padres que no los supervisan o los educan para que no lo hagan y la de personas en estado inconveniente (borrachos) que de esta forma quieren satisfacer su ansía de realizar bromas.
Tan solo en lo que va del año, se erogan por cada llamada falsa un total de 360 pesos, solo en el área de Protección Civil y Bomberos, sin dejar a un lado que cada vez que sucede algo así, también acuden los policías y la Cruz Roja, para prestar el auxilio, cuando son realmente inexistentes, provocando pérdida de tiempo.
Si bien es cierto se ha tratado de regularizar sanciones para quien sea sorprendido efectuando estos telefonemas, lo cierto es que no se ha podido contar un una forma eficiente de detectar a quienes lo realicen y de esta manera se han salvado que se les aplique sanciones a los que juegan inclusive con la vida de las personas.
Según la corporación de Bomberos, ellos al día reciben en promedio cien llamadas de broma y por lo menos a cinco se acude para auxiliar a las personas que lo requieren, sin que muchas veces se tenga el éxito requerido, pues no existe tal hecho y esto provoca entre otras cosas que se tenga un problema mayor.
El problema radica en que cuando se acude a uno de esos servicios se tienen que atender varios rubros, entre ellos agrupar a los que responden, notificar a los hospitales para que se encuentren alerta, buscar los servicios de apoyo, asegurar la escena, el combustible requerido y las horas máquina que se emplean y hacen que se desgasten las unidades.
Josué Ceja Espejo, quien actualmente es Director de Protección Civil y Comandante de Bomberos municipales, hace un llamado a la población, principalmente a los padres de los niños que cooperen con las corporaciones de emergencia, evitando que se realicen este tipo de llamadas, que por desgracia provocan los problemas que se tienen.
Cabe recordar que los bomberos se localizan junto con Protección Civil en las afueras de la ciudad, cerca de la población de Ranchoapan, lo que provoca que desplazarlos a lugares como el barrio Campeche en una llamada falsa, representa un problema de tiempo, que si tienen otra emergencia por ejemplo a la altura del Km – 3, generaría que llegaran tarde al siniestro.
Sin lugar a dudas las autoridades tendrán que realizar un trabajo más profundo para dar con el paradero de los bromistas, que de continuar con estas acciones, provocarían que se tuviera que lamentar en otros lados donde si existen verdaderos accidentes, el que no se cuente con la atención inmediata, pues el personal con que cuentan es mínimo y las unidades también lo son.
Ejemplos existen varios lo que se puede fácilmente describir, caso, alertan que hay una fuga de gas en una escuela llaman y reportan, se acude con tal veracidad de acuerdo al riesgo “escuela – niños” al llegar nadie sabe quién reportó y al fin y al cabo solo lo hacen por que llego un olor a gas u otro olor similar sin dar más datos o sin existir realmente el hecho.