Vie. Mar 29th, 2024

HealthDay News | New York – Muchas personas insisten en que las articulaciones les duelen más cuando llueve. Pero quizá esa idea popular carezca de fundamento, sugiere un nuevo estudio.

El estudio, de más de 1.5 millones de estadounidenses mayores, encontró que las personas no eran más propensas a visitar al médico con dolor de articulaciones o de espalda durante las semanas lluviosas que durante las soleadas.

Incluso entre las personas con artritis, no hubo una conexión entre la lluvia y las quejas de los pacientes sobre el dolor.

Los hallazgos ponen en duda la idea de que un dolor de rodilla pueda predecir la lluvia, comentó el investigador líder, el Dr. Anupam Jena, profesor asociado en la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard.

«Independientemente de cómo lo analizáramos, no observamos una relación», dijo Jena.

La idea de que el tiempo afecte a los síntomas corporales data de la antigüedad, anotó. Y todavía ahora muchas personas creen con firmeza que ciertas condiciones climáticas empeoran el dolor de las articulaciones.

La lluvia, y también la humedad y los cambios en la presión barométrica, están entre las condiciones a las que se culpa con mayor frecuencia.

«Existe esa creencia común», dijo Jena. Y algunos estudios, añadió, han sugerido que quizá haya algo de verdad. Pero han sido pequeños.

Entonces, el equipo de Jena adoptó otro enfoque.

Los investigadores recurrieron a los expedientes de más de 1.5 millones de beneficiarios de Medicare, que detallaban más de 11 millones de visitas al médico entre 2008 y 2012. Entonces, emparejaron esa información con datos sobre la precipitación de la lluvia de estaciones meteorológicas de EE. UU.

El estudio encontró que, en general, no era más probable que los pacientes se quejaran de dolor en las articulaciones o en la espalda en los días lluviosos, en comparación con los días soleados. Apenas poco más de un 6 por ciento de los expedientes de los pacientes indicaban dolor tanto en días lluviosos como en días secos.

Tampoco hubo evidencias de que los pacientes tuvieran más dolores cuando su visita a un consultorio ocurrió durante una semana de lluvias intensas.

Esto fue así incluso cuando los investigadores se enfocaron en los adultos mayores con artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune que provoca inflamación en las articulaciones y en otros tejidos del cuerpo.

¿Pero los hallazgos desmienten toda conexión entre la lluvia y el dolor en las articulaciones?

No, dijo Jena. «Eso no significa que no exista una relación», anotó.

El Dr. Chap Sampson, miembro del Colegio Americano de Reumatología (American College of Rheumatology), se mostró de acuerdo.

Esto se debe a que el estudio solo observó visitas al médico. Sampson dijo que esto pasa por alto a muchas personas que gestionan el dolor adicional mediante «autocuidados».

Además, indicó, incluso si una persona tiene síntomas en un día lluvioso, y llama al médico, la cita no necesariamente ocurra pronto.

Sampson, reumatólogo en Washington Regional en Fayetteville, Arkansas, dijo que en su experiencia, muchos pacientes creen que el tiempo afecta a sus síntomas.

«Siempre lo mencionan», afirmó.

Pero la lluvia no siempre es el culpable, añadió Sampson. Algunos pacientes creen que las bajadas de temperatura, por ejemplo, exacerban su dolor.

Jena enfatizó que su estudio solo observó a la lluvia. Añadió que el «tiempo extremo» (días con mucho frío o mucho calor) podría tener unos efectos mayores en el dolor corporal.

Dado que nadie puede cambiar el tiempo, ¿qué puede hacer la gente si cree que afecta a sus síntomas?

Sampson dijo que su consejo es hacer con regularidad cosas que ayuden a controlar el dolor de la artritis, como caminar o el ejercicio.

Jena comentó que no esperaba que los hallazgos de su equipo cambiaran la opinión de las personas sobre sus propias experiencias.

«En realidad esa no es la idea del estudio», explicó. «Si alguien siente dolor, siente dolor».

Pero Jena dijo que quizá las personas deban examinar sus creencias. ¿Con qué frecuencia sienten dolor un día soleado? ¿Es posible que simplemente noten más el dolor en los días lluviosos? ¿O algo de esos días lluviosos fomenta sus dolores?

El sesgo de ver ciertos patrones es parte de la naturaleza humana, sugirió.

«Si durante generaciones la gente ha dicho que se siente dolor en las articulaciones cuando llueve, uno tiende a creerlo», aseguró Jena. Entonces, si su rodilla le duele un día lluvioso, lo notará. Pero si no tiene dolor un día lluvioso, o tiene dolor un día seco, quizá lo olvide.

«La gente puede ver patrones donde no los hay», señaló Jena.

Los hallazgos aparecen en la edición en línea del 13 de diciembre de la revista BMJ.