EL GRAN KAYMAN, CATEMACO, VER.-El crecimiento desordenado del comercio ambulante, causa el caos vial en la principales avenidas.
Carretilleros con sus productos en venta de todo tipo de frutas y legumbres expuestos al aire libre sin ningún control sanitario. Expendedores de comida en triciclos operan a su libre albedrio sin ley ni control alguno por parte del regidor de comercio, recuperadores de cuota de piso o inspectores sanitarios.
Estos productos no controlados, ponen en peligro la vida del público consumidor, amén de la gran obstrucción que realizan con sus productos en las calles o banquetas, las que invaden a la hora que se les pega la gana, echando al arroyo vehicular al peatón, exponiéndolo a ser atropellado por algún desorientado automovilista o por un ciclista, de esos muchos que existen en la ciudad.
No hay respeto para el Bando de Policía y Buen Gobierno.
Empleados menores siguen solapando a esta plaga de ambulantes, no respetan el reglamento que norma sus actividades, esto también causa molestias al comercio establecido, el cual es obligado a pagar impuestos; mientras que los vendedores informales evaden toda responsabilidad fiscal.
La colecta de piso es muy barata sin establecer donde deben estar semifijos éstos. Ocasionan el caos vial, deambulan por las principales calles del centro de esa hermosa ciudad. Con esta clase de ayuda jamás llegará a obtener la nominación de ‘Pueblo Mágico’.
Alguien debe hacerse cargo de los desperfectos, ¿De dónde salen tantos permisos para que prolifere el comercio ambulante?
“La ciudad más limpia no es la que más se barre, sino la que menos se contamina”, y lo que hacen estos carretilleros y vendedores de antojitos en triciclos es generar gran cantidad de basura.
Este domingo 26 de mayo se llevó a cabo una campaña de limpieza a nivel nacional. Urge poner orden en ese rubro, investigar quien se está pasando de listo y genera que proliferen tantos vendedores ambulantes.
Sabemos que hay necesidad, pero el comercio ambulante debe operar de manera ordenada y con respeto a un reglamento que norme sus actividades. Sólo generan basura y no impuestos de manera desorganizada.
¿Acaso algún ‘influyente’ le está rindiendo tributo a los espacios y permiso$? Porque en lugar de un bien de necesidad social, los vendedores ambulantes se han convertido en una plaga sin control, en especial los carretilleros gente de otros lares que sólo generan inestabilidad comercial y basura.