Felicita Ana Güezmes García a las organizadoras del Encuentro Nacional de Legisladoras de las Comisiones para la Igualdad de Género y de las Titulares de los Mecanismos para el Adelanto de las Mujeres.
Hay estados sin avance alguno, y otros que han dado dos pasitos para adelante y tres para atrás, expuso Marcela Eternod Arámburu, del Inmujeres.
Comunicado LEGISVER / Boca del Río, Ver.—Aunque cada estado del país tiene su propia historia, es lamentable que algunos congresos locales ni siquiera tengan comisiones de Equidad y Género, afirmó la representante de ONU Mujeres en México, Ana Güezmes García, quien felicitó a Veracruz por sus avances en la materia y a las organizadoras del Encuentro Nacional de Legisladoras de las Comisiones para la Igualdad de Género y de las Titulares de los Mecanismos para el Adelanto de las Mujeres, celebrado en Boca del Río.
Güezmes García, que además es directora regional del organismo para México, Centroamérica, Cuba y República Dominicana, consideró que, pese a la dificultad para establecer políticas de pacto, esta reunión congregó a muchas mujeres de distintas ideologías y partidos, y se debe sacar provecho de este encuentro, en favor del género femenino.
Entre los acuerdos logrados destaca la suma de esfuerzos para trabajar en el ámbito legislativo y de políticas públicas para erradicar la discriminación, la exclusión y la violencia que viven mujeres y niñas mexicanas. Además, obtener recursos para cumplir con las metas planteadas.
La también integrante de ONU Mujeres México, María de la Paz López Barajas, se refirió a la armonización legislativa y destacó la necesidad de respetar recomendaciones internacionales, como las del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés), que pide a los diferentes órdenes de gobierno aplicar medidas para erradicar la discriminación.
También, y por ley, obliga a utilizar “términos apropiados” que el Estado debe poner en marcha para acelerar el cambio: “Establecer la protección jurídica de los derechos de las mujeres, con medidas adecuadas de carácter legislativo. No sólo tipificar delitos y sancionarlos, pues de esto están plagadas las leyes no sólo en México. Urge un andamiaje jurídico que ponga parejo el piso entre hombres y mujeres”.
De acuerdo con López Barajas, en cuestión política, las mujeres ya no están en cuota, sino en paridad, y cuando se fortalezca la presencia de las mujeres en cargos de toma de decisiones, las medidas “adecuadas y apropiadas” ya no serán necesarias.
Por su parte, la secretaria ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Marcela Eternod Arámburu, dijo que entre las preocupaciones de la CEDAW y la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belem do Pará), están que la legislación de México no es homogénea y el desequilibrio jurídico entre las entidades federativas.
Hay estados sin avance alguno –continuó– y otros que han dado dos pasitos para adelante y tres para atrás. Puso como ejemplo Chihuahua, que ni siquiera ha tipificado el feminicidio, o las entidades donde configurar el delito de estupro exige que la víctima sea casta y haya vivido honestamente, así como la igualdad y obligaciones en el divorcio, que sólo se contemplan en cuatro códigos civiles locales.
Eternod Arámburu explicó que esto genera desigualdades que pueden corregirse con la armonización legislativa, porque en México ya no deben permitirse leyes federales de amplio espectro y leyes estatales incongruentes entre sí. Legisladoras y mecanismos tienen mucho por hacer para cumplir con las recomendaciones de la CEDAW, cuya próxima evaluación del país será en noviembre.