• PRD entre decadencia y albazos

“En política no hay que llorar sobre la leche derramada… una cosa es la fingida amistad y otra la complicidad de parte de quienes en su tiempo convirtieron la administración pública municipal de Catemaco en botín de mafias y cofradías.

El evento de afiliación al PRD celebrado en el salón Emily fue todo, menos eso afiliar posibles militantes, los asistentes —cerca de 200 personas, en su mayoría acarreados—, no se afiliaron, sus argumentos; no contar en su momento con la credencial de elector. Sudando la gota gorda presenciaron el romanticismo político entre Sergio Cadena Martínez, Jorge Gonzáles Azamar y Sergio Guzmán Coubert, que a la Juan Gabriel, públicamente se juraban amor eterno político, con la finalidad de seguir hincándole el diente al pueblo catemaqueño, si es que se dejan nuevamente. A sabiendas que el continuismo político de estos “tingoliches” convirtió al mágico municipio del paraíso turístico a la barbarie política; el abuso de poder cuando lo ostentaron fue la constante, los excesos personales a las arcas municipales se dieron convirtiéndose algunos en «nuevos ricos».

El continuismo ha significado el atraso y debacle económica del pueblo de Catemaco, al que sumergieron en un clima de inestabilidad e inseguridad social y al que siguen considerando su rehén y un pueblo amnésico. En el logro de sus ambiciosos objetivos, sus promesas políticas son ligeras, pero muy pesadas de cumplir.

El PRD no tiene presencia en el municipio catemaqueño, es un partido decadente. Hoy en día los eternos conflictos perredistas parecen exacerbarse con vistas a la urgencia de establecer líneas centrales de su estrategia para años venideros en base a que con tanto cacharro oxidado, tingoliches corruptos y la cúpula del centro tiende a desaparecer al PRD, cediendo su registro a la asociación Siglo 21; donde viven y reinan los chuchos y no dan cabida al ‘chiquitaje’ que hoy con burdas afiliaciones políticas tratan de llamar la atención al centro cupular.

Lo que no quiere entender Jesús Alberto Velásquez dirigente estatal del PRD, Sergio Cadena Martínez, ni el supuesto líder moral Rogelio Franco Castán, quien sin fundamento político gusta de tirar la pelota en patio ajeno sin calidad moral, con el solo hecho de congratularse a ciertos tingoliches rapiñeros, pero a está le vino de rebote; Franco Castán sabe que el PRD agoniza en Veracruz y en todo el país, su escasa presencia en menos de la mitad de los municipios jarochos, muestran su trágica realidad y la fragilidad de su supuesta unidad orgánica, la vulnerabilidad de sus alianzas y el sentido mismo de su nula participación política muestran su situación crítica real, que cuestiona las bases de su propia definición.

El amnésico Franco Castán por conveniencia propia olvida que el PRD se formó de la unión de dos corrientes ideológicas agrupadas en diferentes organismos: el nacionalismo revolucionario PRI y la izquierda socialista y que hoy se dio cuenta en dicha reunión, aunque se haga el occiso de la reducida participación ocasional de una incierta militancia, por ende el fracaso. Tan pesimamente organizados estaban que entre ellos vino el albazo politiquero Sergio Cadena Guzmán. Así dijo se llamaba el ‘maistro’ de ceremonias prof. Tufy destapó a Sergio Cadena Martínez como nuevo dirigentes estatales del PRD, ante la cara de ‘fuchi’ del propio Jesús Alberto Velásquez y Franco Castán murmurando micrófono en mano que ahí se encontraba el próximo alcalde de Catemaco. Hágame el desgraciado favor, valiéndoles ma… drina lo que piensen los catemaqueños la ambición les gana ya se reparten el futuro botín entre ellos, “total a pueblo jodido acabarlo de joder”.