Sáb. Abr 20th, 2024

Recibí un correo electrónico recientemente, por parte de unos amigos defensores de los animales en la ciudad de Xalapa, que me preocupó y sorprendió mucho, éste dice a la letra:

“Promoverán Turismo de Cacería” decía la nota periodística de un diario de la capital hace algunos días, refiriéndose a que el Gobierno del Estado promoverá el turismo cinegético de cacería, actividad que deja a Tamaulipas, Coahuila y Durango, cerca de 150 millones de dólares anuales. (Cuanta gente enferma de sus emociones para que  esos Estados hayan convertido en un negocio de esa magnitud, el matar por diversión).

Han pasado más de dos mil años desde la muerte de Cristo…y tal parece que fue ayer… porque en nada hemos evolucionado a pesar de que la ciencia y la tecnología han dado muestra fehaciente de saltos impresionantes, sin embargo en nuestras emociones seguimos siendo enanos aunque logremos conquistar las estrellas.

El hombre comenzó a cazar para subsistir, actividad que se realiza aún en algunas regiones para satisfacer las necesidades indispensables de grupos humanos, ligados a zonas rurales donde la disponibilidad de especies cinegéticas es alta, con modos de producción, basado en el desarrollo de incipientes tecnologías y técnicas primitivas de recolección cacería y pesca.

Pero la distancia entre la necesidad de matar para sobrevivir y la satisfacción ociosa de matar para “divertirse”, resulta abismal. El diccionario de la Lengua Española define al Sadismo desde el punto de vista psicológico como la crueldad con la que se trata a un ser vivo, otra acepción de Sadismo expresa la inclinación sexual en la que el  placer erótico va unido a un sufrimiento físico infringido a otro ser vivo).

Con toda certeza que no podremos hablar de evolución humana, mientras antepongamos la riqueza material a la del respeto por la vida…

La sociedad le ha dado nombre a este tipo de caza y le llama: Caza Lúdica a la hoy mal llamada “Caza Deportiva”… y entendemos por lúdica al proceso ligado al desarrollo humano, el cual no es una ciencia ni una disciplina, ni mucho menos una nueva moda, es más bien una actitud, una predisposición del ser frente a la cotidianidad, una forma de estar en la vida, de relacionarse con ella, en esos espacios en que se logran disfrute, goce y felicidad, acompañados de la distinción que producen actividades simbólicas e imaginarias como el juego, el baile, el arte, el afecto y el amor.

También otra serie de afectaciones en las cuales existen interacciones sociales se pueden considerar lúdicas como son el baile, el amor y el afecto. Lo que tienen en común estas prácticas culturales, es que en la mayoría de los casos, dichas prácticas actúan sin más recompensa que la gratitud y la felicidad.

La mal llamada Caza deportiva; matar por diversión… aunque sea legal es una violación de los derechos de los animales, responsable no sólo de la muerte de miles de ejemplares salvajes cada año, es además un problema de ética que convierte la muerte en una alternativa de ocio, es una amenaza ecológica para cientos de especies autóctonas y migratorias, además de la contaminación que se produce por plomo, en humedales y espacios naturales provocadas por las municiones.

La absurda y retrógrada “caza deportiva” que algunos insensibles se atreven a exhibir como trofeos disecados en las paredes de sus residencias y que lo único que verdaderamente muestran, es su atavismo emocional y falta de consideración,  su nulo respeto y poca  evolución humana.

En un acto de civilidad humana el Licenciado Fidel Herrera Beltrán se opuso al sufrimiento al que fueron sometidos los toros en la Feria de Tlacotalpan. Licenciado; Gobernador de nuestro Estado…una vez más ¡Que Veracruz encuentre otras formas más dignas de ganarse la vida! debemos aprender a ser más ingeniosos y sensibles…no permita que se promueva este tipo de “Turismo de Cacería”…nos denigra a todos. Por el bien ético y moral de Veracruz…“NO AL TURISMO DE CACERÍA”.

Tengo conocimiento de lo que es la cacería cinegética, de hecho hemos escrito de ella en este espacio en ocasiones anteriores, lamentablemente es una práctica retrógrada contra toda evolución humana, que implica dolor y sufrimiento para los animales que son empleados en ella, muchos de estos animales reciben poca comida para que vuelen débilmente y sean cazados más fácil, a otros les atan objetos a sus patitas para que sea más divertida y lenta su muerte y podríamos enumerar más aberraciones, por ello después de leer este correo me preocupó que en Veracruz pueda ocurrir esto y definitivamente también apoyo el sentir de los activistas a favor del bienestar animal (que también votamos y contamos como ciudadanos en el estado)  quienes nos pronunciamos en un rotundo NO al turismo de cacería en Veracruz.

Sr. Gobernador, sabemos que en este momento hay temas que ocupan la agenda de Veracruz: el nuevo modelo económico, la inseguridad, la pobreza, el desempleo, la ampliación del presupuesto para el IEV, etc. Pero muchos animales que viven en el dolor no pueden esperar a que siempre haya temas “más importantes” y quienes nos preocupamos y actuamos a favor de ellos diariamente con nuestro tiempo, dinero y esfuerzo, tampoco podemos seguir esperando a que volteen a ver a este sector ni permitir que se sigan cometiendo más atropellos.

Por eso le rogamos que no permita que se instale el turismo de cacería en Veracruz, consideramos que ya suficiente crueldad hay con los toros que flagelan en Tlacotalpan durante las fiestas de la Candelaria, al igual que en Xico y Teocelo en sus respectivas celebraciones, ¿el turismo de cacería también se convertirá y operará bajo el nombre de tradición?.

Sr. Gobernador lo que urge es una Ley que proteja a los animales en Veracruz y tipifique y sancione como delito el maltrato que se comete diariamente contra ellos, debemos avanzar en la cultura del respeto y cuidado a los más indefensos para ver cambios en lo macro y alcanzar el desarrollo.

Usted es un hombre inteligente y sensible que desempeña un trabajo admirable, por eso estamos seguros que también gobernará para los más indefensos.
Comentarios al E-mail: [email protected]