Vie. Abr 19th, 2024
  • Resultan inseguras para transporte de carga; bandoleros y ciudadanos “trabajan” juntos

Gobernantes | Xalapa, Ver.— Cómo estará la situación económica y la crisis que el delegado de la Asociación Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac) en la zona centro del Estado, Aldo Romero Lezama denuncia que la autopista Puebla-Veracruz “se ha convertido en una de las más peligrosas para el sector del transporte público”, pues dice que de acuerdo a cifras recabadas “en promedio son robadas hasta cuatro unidades” a la semana, lo que causa pérdidas económicas millonarias a los empresarios del sector, y explica que por ello les urge conocer las estrategias del Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador para contrarrestar esos delitos de robo al autotransporte de carga que, lejos de disminuir, va al alza.

Los robos en las carreteras que enlazan a Veracruz y Puebla suelen darse mediante retenes falsos, aunque la autoridad no está interesada en intervenir, pues destaca que elementos de Veracruz, tanto a nivel estatal como municipal, así como la federación, tienen la obligación de tomar medidas pero no lo hacen.

Los retenes son camionetas que simulan ser patrullas que hacen la parada a las unidades grandes y pequeñas, y cuando se detienen proceden al atraco. El empresario reconoce que “en las carreteras de todo el país persisten focos rojos en cuanto a inseguridad, pero el corredor Puebla-Veracruz es uno de los más críticos y peligrosos”, y estos delitos se mantienen prácticamente impunes, por lo que esperan los integrantes de Amotac que el nuevo gobierno actúe con firmeza y con la creación de la Guardia Nacional haya un freno a los ilícitos que, insiste, suben, en lugar de disminuir.

Dice que su confianza se basa en que durante su campaña, López Obrador se entrevistó con Rafael Ortiz Pacheco, dirigente nacional de Amotac, “y hubo acuerdos de apoyo al transporte y para combatir la inseguridad en carreteras en todo el país”. Este reclamo de auxilio y poner orden en vías de comunicación de todo el país es un clamor generalizado.

Los transportistas reconocen que la Policía Federal “está haciendo su trabajo, pero no se da abasto y son rebasados”, por lo que harían falta más elementos y patrullas para brindar vigilancia especialmente en esta zona limítrofe entre Puebla y Veracruz, especialmente en la vecina entidad “que es donde más se están dando casos de inseguridad”, pues se ha convertido en tierra de nadie y junto a las bandas delictivas están ciudadanos comunes y corrientes que participan a cambio de “apoyos”.