Sáb. May 18th, 2024

China ha expresado su firme postura contra cualquier forma de disidencia esta semana, cuando el Consejo de Derechos Humanos de la ONU lleve a cabo su primera revisión en cinco años sobre el historial del país. Según fuentes de The Geneva Observer, a pesar de las crecientes inquietudes sobre la represión continua de los uigures en Xinjiang y la supresión de activistas pro democracia en Hong Kong, la misión diplomática china ha solicitado a la ONU en Ginebra que evite la participación de “separatistas anti-China” en la sesión del martes, requiriendo acreditación para asistir, y que prohíba lemas o pancartas “anti-China” en las instalaciones.

En ese sentido, cuatro diplomáticos dijeron a la agencia Reuters que la misión de China ante las Naciones Unidas en Ginebra había estado enviando memorandos a los funcionarios en el período previo a la revisión del historial de Beijing por parte del Consejo de Derechos Humanos de la ONU prevista para el martes.

La misión de China no respondió a una solicitud de Reuters de comentarios sobre el lobby reportado. En una declaración, dijo que Beijing “se opone firmemente a la politización de los derechos humanos” y “promueve una gobernanza global de los derechos humanos más justa, equitativa e inclusiva”.

Pese a las afirmaciones de China, en una comunicación el régimen comunista recomendó que cualquier actividad de acoso dentro de la sala de reuniones se maneje de manera discreta y rápida para evitar interrupciones en la revisión. Asimismo, recordaron un incidente de 2013 en el que activistas tibetanos protestaron en los terrenos de la ONU. Además, China solicitó un plan de seguridad especial para su delegación de 60 miembros y proporcionó una lista de casi dos docenas de activistas uigures, tibetanos y de Hong Kong que considera motivo de preocupación, instando a la ONU a rechazar cualquier solicitud de estos activistas para organizar eventos paralelos.

En este contexto, está prevista una protesta el martes frente al edificio de la ONU con activistas tibetanos, uigures y de Hong Kong y disidentes chinos.

Mientras tanto, varios miembros de la etnia uigur y de la organización espiritual Falun Gong se manifestaron este lunes ante la sede europea de las Naciones Unidas. Los manifestantes portaban pancartas en varios idiomas en las que podía leerse consignas como “Parad el trabajo forzado de los uigures” o “Falun Gong es brutalmente perseguido por el Gobierno chino”, con el fin de presionar a las delegaciones del Consejo de Derechos Humanos que mañana revisarán la situación de las libertades fundamentales de China desde 2018.