Haciendo un análisis al día de hoy y un comparativo de lo que esta pasando en nuestro estado de Veracruz, observamos que existe un antes y un después, menciono antes tomando como referencia el periodo del gobierno de Miguel Alemán y uno después por el periodo que estamos viviendo con Fidel Herrera al frente de este gobierno de la fidelidad, pero no sabemos fidelidad ¿a que o a quien?
El gobierno de Fidel Herrera Beltrán se ha caracterizado, por actuar de manera populista, tratando de dejar huella de sus acciones, tratando de impulsar a los nuevos valores de la política, que no han entendido y ni entenderán que la política no es servirse del pueblo, encausa sus acciones difundiendo algunos destellos preparados previamente para simular que realmente hay un gobierno eficiente y de trabajo.
El sentir real de la población es de molestia por la inseguridad, misma que no vemos reflejado en las urnas, ya que la compra venta de votos es lo prioritario, existe aproximadamente un 53.5% de la población que se abstiene de emitir sus sufragios, por la simple y sencilla razón de que piensan que el gobierno no cambiara. En una encuesta que de manera personal realizamos, pudimos apreciar que de 10 ciudadano, 7 manifiestan que a partir del cambio del gobierno estatal, el índice de la delincuencia se ha disparado notablemente, lo que queda confirmado con los hechos de fechas recientes, y por las acciones que están ejerciendo grupos de la delincuencia organizada en todo el estado y en particular en la zona Veracruz-Boca del Río.
Como antecedente mencionamos el “levantón” o secuestro en la persona de Mauro Loyo Morales, hijo del ex secretario de salud en la época de Miguel Alemán, quien por cierto tiene una pista de aterrizaje en la zona del golfo veracruzano, el secuestro en aquel tiempo fue realizado por un comando de ocho personas con armas de grueso calibre en un rancho de su propiedad en el municipio de Medellín de Bravo, lo cual propició una fuerte movilización policíaca para dar con su paradero, afortunadamente apareció sano y salvo un miércoles 28 de diciembre del 2006 o sea 6 días después de su secuestro, hasta el día de hoy no sabemos realmente que paso o quizá alguien por ahí, tiene algún indicio sobre este caso muy sonado.
Empresarios de Poza Rica, Veracruz, Boca del Río, Córdoba, Coatzacoalcos, por mencionar algunos, han sufrido en carne propia la inseguridad imperante, de lo más actual, mencionamos el secuestro y asesinato del menor de edad Juan Enrique Espinosa Díaz originario de Minatitlan y encontrado en Jaltipan, Ver.
A manera de recordatorio sobre el tema de la inseguridad, es importante recordar lo que paso con los 3 secuestros que tuvimos conocimiento en diciembre del 2006, cuando el señor Gobernador Fidel Herrera Beltrán manifestó expresamente lo siguiente: “El próximo año convocaría a un pacto de seguridad y protección familiar, para que se acaben este tipo de delitos que afectan y dañan a la sociedad veracruzana”. De ese día a la fecha han transcurridos mas 910 días de esta declaración, en donde observamos que no ha pasado nada, al contrario, se ha incrementado la delincuencia en la entidad veracruzana.
Prueba de esto, se confirma con los acontecimientos del día 13 de Julio del presente año, por la balacera registrada en el centro histórico de la ciudad y puerto de Veracruz, con un saldo de 3 policías heridos, dos sicarios muertos y un sicario mas herido, mas un taxista y una menor heridos, esta trifulca ocasiono daños a 12 negociaciones que se vieron directa y visiblemente afectadas por los proyectiles.
Respecto a esta balacera apreciamos dos puntos de vista, la primera que es las mas objetiva en donde la CANACO de Veracruz a través de su presidente Oscar Lara Hernández expresa su malestar por estos acontecimientos y advierte “Que de continuar estos escenarios de violencia que superan a cualquier guión cinematográfico, podría verse afectado nuestro destino en materia turística. Asimismo manifestó que esperan poder tener un acercamiento con las autoridades de la Secretaría de Hacienda, del Ayuntamiento de Veracruz, y del gobierno del estado para apoyar con algunas exenciones de impuestos a quienes resultaron afectados.
El otro punto de vista, menos serio, proviene del Presidente del Consejo Empresarial Veracruzano A.C. (CEVAC), Anselmo Estandía Colón, por cierto muy amigo del ejecutivo estatal, actualmente este personaje ocupa la Presidencia del Patronato del Acuario de Veracruz. Para mi forma de ver las cosas el citado Anselmo Estandia se maneja como vocero de la fidelidad, tal como lo hace en Jalapa el pasante de empresario, Andrés Beceiro quien también se hace pasar como representante de un grupo empresarial. Resulta que Anselmo Estandia minimizo lo ocurrido por la balacera ocurrida en la ciudad de Veracruz, quien calificó este tipo de acciones como un “hecho aislado”, y calificó los daños como “colaterales”.
Es preocupante lo que esta pasando, y en el gobierno estatal no se ve la forma de coordinar esfuerzos con la Federación para atacar al crimen organizado, no hemos observado ninguna acción importante de parte del estado, para atender el combato al narcotráfico ni la corrupción. Tal parece que se hacen los muertitos, ¿o será que algo hay atrás de todo esto? Es pregunta. Lo único que podríamos esperar y que hemos comprobado, es la intolerancia para aceptar las críticas y no tomar al toro por los cuernos.
CUANTO NOS CUESTA LA INSEGURIDAD EN MÉXICO Y SUS ORÍGENES
A nuestro México, el costo de la delincuencia es del orden de 130 mil millones de dólares al año, que son equivalentes a 15% del Producto Interno Bruto anual, de acuerdo con el balance y análisis determinado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Esta cifra nos tiene ubicado con el deshonroso segundo lugar en América Latina, por debajo de Colombia, donde el déficit alcanza 25%; Por eso, en parte tiene razón el Presidente Felipe Calderón de atacar frontalmente el crimen organizado, situación que no es empujada de la misma forma por muchos gobiernos estatales.
No debemos de perder de vista que los ingresos del Petróleo están a la baja y a punto de desaparecer, aunado a los problemas que tenemos del crimen organizado, esto esta afectando en el insuficiente número de turistas que nos visitan, lo que vulnera a uno de los sectores que deberían ser fundamentales para sostener la economía del país, ya que nuestro clima, los inmensos litorales, junto con las bellezas naturales y los testimonios de nuestras tradiciones y nuestra cultura, nos identifican como una nación privilegiada que podría sostener su crecimiento general con esa actividad económica si no estuviera asediada por la criminalidad, el narcotráfico y la falta de confianza en los regímenes de propiedad y condominio, a lo que se debe agregar el terror que les infunden a los extranjeros nuestras autoridades.
La inseguridad se manifiesta en muchos aspectos, y desde mi punto de vista pueden ser los siguientes:
El primero de ellos por lo que estamos sufriendo en Veracruz, es la Delincuencia organizada generado por el narcotráfico, probablemente estimado lector usted esta enterado que muchas drogas se distribuyen en los antros. Al respecto una acción responsable como ciudadano es no participar en actividades relacionadas con el consumo, venta, compra, distribución de ningún tipo de drogas.
Otro tiene sus orígenes en el desempleo, la mayoría ha sido víctima al perder su trabajo, no conseguir uno bien remunerado. Esto aunado a los bajos salarios y que tiene una estrecha relación entre el desempleo, los bajos salarios y la piratería, este último ha proliferado no solo porque ha sido una fuente de empleo mejor remunerada que otras, sino porque los productos originales no están al alcance de la mayoría.
La desintegración familiar, relacionada con el desempleo, desde hace “varias décadas”, en la gran mayoría de las familias mexicanas, el ingreso del padre no ha alcanzado para sostener a todos, por lo cual la mujer se ha visto en la necesidad de apoyar en la economía familiar trabajando fuera de su casa. Esta situación ha originado otra serie de problemas: niños más descuidados; algunos que no van a la escuela y como consecuencia no tienen las mismas oportunidades que otros.
Colabora en mucho nuestro Sistema Judicial ineficiente y con corrupción,
El sistema judicial de nuestro país tiene una gran responsabilidad, ya que no existe capacitación de la policía, no existe responsabilidad del ministerio público y los bajos salarios de los recursos humanos de este rubro. Aquí tenemos que reflexionar sobre nuestras actitudes de participar en la cadena de actos de corrupción. ¿Has pensado que si tú le das dinero a un policía para que no te levante una infracción de tránsito? ¿Has pensado que con el tiempo este servidor publico puede ascender o cambiar de lugar de trabajo en la misma corporación o en otra dependencia y ser este quien acepte dinero de un individuo que cometió un crimen más serio como robar, matar, secuestrar? ¿Has sido parte de esto? SI usted amable lector analiza este punto, tenemos el derecho de exigir, pero también tenemos la obligación de aportar para ponerle fin a la situación.
Tenemos problemas con el sistema penitenciario.- Es un tema que requiere de un análisis mucho más profundo, que va más allá de proponer penas más severas a los delincuentes, es decir, sí debe haber penas más severas pero debe haber otras acciones paralelas. Aquí vale la pena vigilar que las cárceles y reclusorios realmente sean “centros de readaptación”. Por que lo único que sabemos es que son las universidades de los delincuentes, lo que no sabían ahí lo aprendieron. Es necesario contar realmente con cárceles de alta seguridad, y que los internos trabajen, estén ocupados, sean apoyados psicológicamente.
La falta de valores como sociedad.- Rechacemos el crimen pero estemos conscientes de que todos somos parte de una sociedad que ha fallado en inculcar valores y dar oportunidades a todos. Es necesario que el empleado, funcionario o servidor publico Cumpla con su trabajo independientemente de la paga.
De todo lo que alcance a mencionar y que quizá falten algunos, es necesario que como ciudadanos “Promovamos valores que dignifiquen a nuestra sociedad” Los educadores, en donde participamos como padres, inculquemos valores a nuestros hijos, los maestros a sus alumnos, los jefes a sus empleados. Con hechos no con palabras, el ejemplo arrastra.
Si queremos que las autoridades actúen con eficacia, rapidez y honestidad, tenemos que ser eficaces, cumplidos y honestos en todas nuestras actividades.
Exijamos mejores policías, pero respetémoslos. Su trabajo es difícil, no denigremos su personalidad, como sociedad tenemos el poder de exigir, vigilar que a ellos se les den sueldos dignos, de acuerdo con su trayectoria, antigüedad, ocupación.
Para los funcionarios públicos que tienen sueldos altísimos de por vida; diputados y senadores que se fijan a sí mismos sus salarios y prestaciones; eliminemos éstas. ¿Para qué necesitan un vehículo, chofer y una escolta de auxiliares? Muchos en ocasiones no se presentan a las reuniones parlamentarias. Pero sobre todo eliminar el pago de viáticos exorbitantes.
Los empresarios deben asumir su parte, trabajar en lo que respecta a la competitividad, enfrentar la crisis, enfrentar la inseguridad, no eliminar empleos regulando los sueldos en época de crisis. Velar por los intereses de nuestro país, El empresario que cuenta con dinero debe utilizar sus recursos para generar mejores empleos y solicitar el apoyo de la ciudadanía para que compre los productos hechos en México. Tenemos una gran área de oportunidad. No compremos piratería, consumamos lo hecho en México.
A las autoridades les toca evitar el contrabando, pero a nosotros nos toca combatirlo. Reflexionemos y actuemos, no hay de otra, el futuro de nuestro país esta en nuestras manos.