En días recientes el Colegio Nacional del Notariado Mexicano decidió designar a la Oaxaqueña Guadalupe Díaz Carranza como su presidenta, – en elección de un jaloneo nunca visto, – y resultando en la historia de esta organización la primer mujer que habrá de presidirla.
En las semanas previas los seguidores de Guadalupe y su contrincante Nicolás Maluf Maloff – mexiquense – llevaron sus campañas por una ruta bastante inusual en el medio pues, no solo sacaron sus trapitos al sol sino que hasta existieron ataques que ventilaron entre medios de comunicación incluso no solo en sus sedes estatales sino en lo nacional.
La arena para la elección fue Monterrey Nuevo León, y de los poco más de 4 mil notarios públicos sólo asistieron 1,530 y Lupita obtuvo 815 votos, Nicolás 710 y la ventaja fue de 105 sufragios, pero se anularon 5 y en resumen menos del 40 % de los fedatarios acudieron a cumplir con su deber.
Los responsables de otorgar certeza jurídica en lo familiar, patrimonial así como, empresarial y profesional ahora celebrarán el mismo ejercicio, pero en el Estado Veracruz, dónde actualmente el Presidente por terminar Adolfo Montalvo Parroquín, según se sabe, ya ha recibido dos planillas de sus colegas; una que encabeza Jorge Hernández Peredo Rezk – Notario en San Rafael – y la otra, por Daniel Cordero Gálvez, de la jurisdicción de Nogales, y lo decidirán el sábado 3 de Diciembre próximo.
El universo de notarios públicos en Veracruz son 306 estando en funciones 277 y los 29 restantes están «vacantes,»y ya veremos en qué porcentaje acuden a sufragar y si son capaces de no ventilar sus propias diferencias de enfoque e intergremiales a través de los medios de comunicación.
El colegio es dirigido, administrado y representado por un Consejo Directivo, y lo integran un presidente, un secretario, un Tesorero y cinco vocales, en resumen, son nueve elementos entre Titulares y sus sustitutos correspondientes. Buena suerte y que todo resulte exitoso.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Dice la ley, que los notarios públicos son profesionales del derecho, investidos de fe pública por el Estado luego entonces, -creo, – tienen el carácter de Servidores Públicos y del mismo modo mantienen su actualización ante la nueva realidad en Veracruz, pienso que resulta de gran importancia por sus aportaciones. En ese sentido, en la agenda venidera quizá valga la pena la revisión de la Ley que los regula en coordinación con el H. Congreso de Veracruz, oyéndoles en sus propuestas y que sean susceptibles de incorporarse a la norma que los rige, previo dictamen legislativo de la comisión respectiva.
¡ ES CUANTO !