En opinión, Por: Joel Sosa Moreno

Juárez: Ejemplo Universal

En la firmeza de sus excepcionales convicciones, por sus patrióticos ideales, a 206 años de su natalicio, podemos afirmar que el Señor Licenciado Benito Juárez García, en lo magnánimo coincidió con Lincoln; en lo justo, con Arístides, con Séneca, en lo estoico y, en lo sabio, con Sócrates.

La pureza de su raza zapoteca, le dotó de singular personalidad, semejante al bronce luminoso de Guelatao, su tierra natal.

Al paso indiferente de su infancia, interpuso férrea voluntad, que le impulsó la fuerza necesaria para poder desenvolverse en las variadas y procelosas proporciones de los difíciles acontecimientos de su época.

Soportando con estoicismo las penalidades físicas, y morales de hombre, esposo, padre de familia y de Primer Magistrado de la Nación, actuó con acendrado patriotismo para salvar del odioso imperialismo a nuestra querida Patria.

Para lograrlo, hubo de rechazar lisonjas, oropel e infinidad de ofrecimientos sobornales y con dignidad, a pesar de la crítica situación nacional, en todos sus aspectos, actuó con firmeza republicana y así obtuvo que México, volviera a ser ¡Patria Libre y Soberana!.

La fortaleza de su espíritu, la tenacidad de sus propósitos, en bien de la Nación, de la justicia y libertad, le dieron la dimensión continental para ser proclamado “Benemérito de las América”.

Si en verdad deseamos que nuestro país alcance la prosperidad en lo cultural, económico, social, político, seguridad y paz, debemos actuar Pueblo y Gobierno (de todos los niveles) con equidad, austeridad y ejemplar conducta como actuí; sin vacilaciones, el creador de las Leyes de Reforma, que en momentos cruciales, supo encontrar la justa resolución a los grandes problemas nacionales.

El apotegma del Benemérito es la base ideal, para que tanto los individuos como las naciones, apliquen en sus actos “EL RESPETO AL DERECHO AJENO, ES LA PAZ”.

Joel Sosa Moreno.

21 de marzo del 2012