Jue. Mar 28th, 2024

 

EXU | DEPORTES.- La selección de Francia logró quedarse con el campeonato de la Copa Mundial de Rusia 2018, luego de vencer 4-2 a su similar de Croacia, la cual será recordada como una de las más gratas revelaciones en una justa mundialista.

En un partido plagado de errores y genialidades, los franceses hicieron valer su contundencia luego de generar solo ocho ocasiones de gol; sin embargo, fueron capaces de marcar en cuatro de ellas, y supieron manejar el partido para alzar la Copa.

El balón rodó en el estadio Luzhniki en Moscú y solo le tomó 18 minutos colarse en las redes de la cabaña de Croacia, cuando el atacante francés Antoine Griezmann cobró un tiro libre que fue desviado por el delantero croata Mario Mandzukic, anotando un autogol.

Los croatas decidieron volver desde atrás como lo hicieron a lo largo de todos los partidos de eliminación directa y 10 minutos después empataron los cartones, gracias a un gran gol del delantero Ivan Perisic, quien tomó un rebote y mandó un zurdazo impresionante.

Parecía que se venía la remontada de los Vatrenis, pero Griezmann dictaminaría lo contrario cuando marcó desde los 11 pasos el 2-1, después de que el árbitro argentino Néstor Pitana indicó un penal ayudado del Video Asistente Arbitral (VAR).

Después del descanso, Croacia continuó en el mismo tenor metiendo a los franceses en su propio campo; sin embargo, Francia, como el equipo grande que es, «dio un golpe en la mesa» y aprovechó una desatención de la zaga rival en la que Paul Pogba le pegó desde afuera del área para ampliar la ventaja.

El joven atacante francés Kylian Mbappé replicó lo hecho por su compañero Pogba, probó al arquero croata Danijel Subasic desde afuera del área y este no tuvo reacción, con lo que encajó el cuarto gol en su cabaña.

Todo parecía escrito, pero Mandzukic estaba dispuesto a «lavar» su error y fue a pelear un balón perdido, el cual hizo bueno al ocasionar que el arquero francés Hugo Lloris no pudiera despejarlo; se lo robó y puso un 4-2 definitivo que le dio la victoria a los galos.

Con este resultado, Francia obtiene su segunda Copa del Mundo y catapulta a su técnico Didier Deschamps a los anales de la historia, al ser el tercer jugador y entrenador que campeona con su selección, como lo hicieron en su momento el brasileño Mario Zagallo y el alemán Franz Beckenbauer.