Abel Cadena Pérez | Catemaco, Ver.— Lleno de hechizo, magia y encantó natural, Catemaco, tierra mística, heredera del conocimiento de la enigmática cultura Olmeca.
Agua, tierra, fuego, aire, elementos que se conjugaron para hacer de Catemaco una expresión terrenal del paraíso… tierra de brujos, chamanes, curanderos, donde lo exótico convive con lo cotidiano, mezclándose para conservar el espíritu mágico cuyo incienso se respira en su ambiente.
Primer Viernes de Marzo, al caer la noche de este jueves se inició el tradicional y místico recorrido en el emblemático paseo del malecón encabezados por brujos, curanderos, chamanes, en compañía
del presidente constitucional de Catemaco, Julio César Ortega Serrano, su esposa Lic. Ericka del Carmen Rosario Morales, Lic. Débora Jazmín Mínquiz Pólito, regidora segunda del H. ayuntamiento, Lic. Juan José Rosario Morales, director del DIF municipal, Lic. Alfonso Tomentino Hernández, representante de la secretaría de turismo del Gobierno del Estado; Lic. Yessika Karina Hernández Ruiz, directora de Turismo Municipal.
Inició frente a la Plazuela del Caracol, hasta llegar al centro ceremonial ubicado en la punta de pesquería, lugar sagrado donde celebraron los rituales de paso, para abrir el portal donde se reafirma el poder del brujo o curandero, cuyo equilibrio interior le otorga facultades para brindar alivio y protección a través de curaciones, conjuros, exorcismo, herbolaria o barridos.
Tradición en Catemaco antiguo, asentamiento de hombres de poder, los más controvertidos del universo mágico mexicano que han pervivido hasta nuestros días creando un linaje extravagante de brujos y curanderos.