El rapero y productor musical Sean “Diddy” Combs, también conocido como “Puff Daddy”, fue sentenciado este viernes a 4 años y 2 meses de cárcel (50 meses), tras ser declarado culpable de dos cargos de transporte de personas con fines de prostitución, en violación a la Ley Mann Act de Estados Unidos.
La condena fue dictada por el juez Arun Subramanian, quien señaló que la pena debía ser lo suficientemente severa para enviar un mensaje a los abusadores y dejar claro que “la explotación y la violencia contra las mujeres conllevan consecuencias reales”. Además de la prisión, Combs deberá pagar una multa de 500 mil dólares y cumplir cinco años de libertad supervisada una vez que concluya su condena.
Durante el juicio, la Fiscalía presentó pruebas y testimonios que acreditaron que el magnate del hip hop organizaba fiestas sexuales conocidas como “freak-offs”, en las que contrataba trabajadoras sexuales y trasladaba a mujeres a través de distintas ciudades de EE.UU. para estos eventos. Testigos, entre ellos su expareja Cassie Ventura, narraron episodios de violencia física, coerción y consumo de drogas.
El juez también consideró que Combs representaba un riesgo de reincidencia, por lo que rechazó otorgarle una pena menor. Sin embargo, el artista fue absuelto de los cargos más graves de trata sexual y conspiración por extorsión, que podrían haber elevado su sentencia hasta 20 años.
Previo a conocer su castigo, Combs intentó mostrarse arrepentido y reconoció haber perdido su carrera y negocios tras el proceso judicial: “Perdí todo, destruí mi reputación. Solo pido que se me considere una segunda oportunidad”, dijo al magistrado.
El rapero, de 55 años, lleva ya 13 meses bajo custodia, mismos que serán descontados de su condena. Sus abogados anunciaron que evaluarán la posibilidad de apelar el fallo.