En Minatitlán, Veracruz, comerciantes han expresado su descontento hacia el ayuntamiento, acusándolo de acoso sistemático mediante cobros excesivos y arbitrarios. Como forma de protesta, han colocado lonas en sus negocios advirtiendo sobre el posible cierre debido a lo que denominan «terrorismo fiscal» por parte de la administración municipal.
Los comerciantes han denunciado que el nuevo empadronamiento y las cuotas exigidas por permisos y servicios representan una carga insostenible, con cobros que varían entre 10 mil y 100 mil pesos, dependiendo del tipo y tamaño del establecimiento. Además, se enfrentan a pagos adicionales por conceptos como salud, protección civil y recolección de basura, incluso en locales que no son de su propiedad.
Moisés Torres Méndez, representante de Enlace Empresarial, criticó la falta de un tabulador claro y denunció que funcionarios municipales, acompañados de la Policía, entregan notificaciones y exigen pagos. Los comerciantes piden tarifas justas y reglas claras, señalando que las tarifas actuales son desproporcionadas en comparación con otras localidades.
Asimismo, cuestionan la intención de la alcaldesa Carmen Medel Palma de imponer tarifas similares a las de la Ciudad de México, sin considerar la situación económica de Minatitlán, que se encuentra en crisis. Ante la falta de diálogo con la administración municipal, los empresarios han anunciado marchas y protestas para solicitar la intervención de autoridades estatales y federales, con el objetivo de frenar lo que consideran un abuso que podría llevarlos a la quiebra.