Vie. Mar 29th, 2024
  • Desde ahora fortalece su aspiración y proyecto a la gubernatura

Ángel Bravo Martínez | San Andrés Tuxtla, Ver.— Pareciera una locura, pero las lecturas son muy claras y están de manifiesto en los escenarios políticos del altiplano nacional y en Veracruz mismo.

La mujer que es muy querida, amada y respetada por el mero preciso que asumirá el poder presidencial el primero de diciembre, ha mostrado a propios y extraños, del primer círculo morenista, ser una muy buena aliada y hasta su cómplice en el ajedrez gubernamental.

Su “ardua y extenuante ‘talacha’ política” bajo la sombra del peje, le permitió en menos de tres años ser diputada federal, senadora de la república por Veracruz y acto seguido secretaria de Energía, pésele a quien le pese y se oponga quien se oponga.

La dama está en el centro de las pestañas de quien enarboló su campaña en contra de “la mafia del poder” y la estela de corrupción;  no se anda por las ramas y en tal sentido ha mostrado su poder tras el trono de AMLO, el presidente electo.

¿Con su venia?; Lo ignoro, pero la oriunda de Zacatecas está tejiendo fino, surronamente   tendiendo la cama y hasta la mesa para la sucesión gubernamental del 2024, guste o disguste al mismo gobernador electo, Cuitláhuac García Jiménez, quien en los últimos días sintió el filo del fino machete y al mismo tiempo el puño de hierro de la protagonista de esta historia que ya lleva varios capítulos bajo las siglas de “La esperanza de México”.

Vea usted si no, el nombramiento de Éric Patrocinio Cisneros Burgos en la secretaría  General de Gobierno y la del doctor Roberto Ramos Alor como secretario de Salud, de quien en un principio dijo que no y finalmente tuvo que apechugar el centralazo del pinche poder y lo mismo está por suceder con quien será Secretario de Educación en Veracruz, pendejos nos son, saben muy bien que ahí está el billete grueso y representa toda la operatividad política y social para afianzar la ambición de poder de la Ingeniero Petroquímica mexicana Roció Nahle García, así está visto y más que planeado, ella quiere ser gobernadora de Veracruz y no de su Estado Zacatecas, donde por cierto no ha sido ni representante de su casilla en temas electorales, por eso no extraña que también durante toda la campaña del Peje en Veracruz le dio absoluto poder de control y decisión para la selección de candidatos a modo a diputados locales y federales, nada más y nada menos que a Manuel Huerta Ladrón de Guevara quien también será su operador político desde el seno de su Instituto Político y con la membrecía de Delegado Federal de la Presidencia de la República.

La poderosa morenista Roció Nahle García tendrá el control absoluto tras el trono gubernamental en Veracruz y Cuitláhuac García será una simple figura decorativa, tal y como se evidenció durante la reciente campaña presidencial del Peje.

A ver si no, a partir de ahora, sigue afirmando que no ganó la gubernatura gracias al efecto de López Obrador y a la inercia de Morena con el poco más del millón 600 mil sufragios en las urnas. Lástima Margarito, para eso me gustabas.